H-ISTORIA DE (des) AMOR

INICIO
imaginarse, idealizar, importante, inaplazable, intentar, impresionar, incendiarse, imperiosos, interesar, ilusionarse, idilio, idiotizar, incorporarse, invitar, inteligencia, incomparable, icónico, idolatrar, idóneo, intenso.
 

NUDO 

Inconstante, inconsciente, ingrato, inaudito, inestable, inadmisible, indolente, improbo, insuficiente, incasto, inconsecuente, impasible, intransigente, inequitativo, invasivo, impensable, irritante, impenetrable, intencional, incoherente, inalcanzable, impune, idiota, inmaduro, inaccesible, impropio, infame, inconfeso, inverosímil, incompetente, ilusorio, inane, imperfecto.
 

DESENLACE
Incertidumbre, ira, irritación, impotencia, impugnar, imprudencia, implorar, intranquilidad, imbécil, increpación, intriga, incordia, improvisar, intento, incomodidad, irse, igualar, imposible, infelice, irreparable, imperdonable... irreversible.

DECEPCIÓN

Decepción se escribe con "D" de deseos frustrados, dolor en el alma, desamor intenso, distanciamiento de la felicidad, dudas profundas, daño al amor propio, dardos al corazón, develación de las mentiras, debilidad del espíritu, declinación de las promesas, decrecimiento de la confianza, deflegmación de amargas lágrimas, deformación de la verdad, defuir de la pena, dehortarción del amor, dejación de los propósitos, dejugación de los lacrimales, delatable indignidad, delaxar la voluntad, delectación premeditada, deleznables promesas, deliberado engaño, defunción de la confianza, deliquio innecesario, delongación de las penas, deludir con premeditación, delusorias palabras, degollante individuo, demacrado rostro, demergido ánimo, debelado corazón, diacrónica ruina, dicacidad del destino, dolido ego, decaimiento del ánimo, dolosa intención, delebles promesas, dulzura falsa, dudosas intenciones, desconfianzas futuras, degradación del alma, damnificador de confianzas, deletérea lengua, dañino sentimiento. Deleble drope.

RAYUELA CAP. 7- JULIO CORTÁZAR

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.